Santander le arruinó la carrera, la dura realidad de Sosa después de la final vs Chivas

Ismael Sosa es una prueba de que un error arbitral no solo influye en el marcador sino en toda una carrera y fue lo que le sucedió en el 2017, en una jugada de la final entre Chivas y Tigres, Sosa fue derribado por Jair Pereira en el área, pero en ese momento, Luis Enrique Santander decidió no marcar nada.

El ‘Chuco’ estaba teniendo un gran torneo con Tigres, era titular con Ricardo Ferretti y gracias a su asociación con André-Pierre Gignac el equipo de Nuevo León llegó a la final, pero esa jugada lo marcaría por años e incluso marcaría un parteaguas en la Liga MX.

Después de que Tigres lo fichó de Pumas, todo iba viento en popa, pero tras da final injusta, no volvió a tener el nivel mostrado ni con la UNAM ni con los auriazules, por eso terminó yéndose al Pachuca en donde poco o nada mostró, tanto bajo su nivel que el argentino terminó en un equipo de Chile.

Sosa ahora está a punto del retiro con casi 37 años y aunque sigue activo en el equipo de Viña del Mar, sabe en el fondo que de haberse marcado aquel penal en el 2017 quizá su carrera hubiera dado un giro diferente, pues se habría vestido de héroe por la jugada en los últimos minutos de una final en el estadio Akron.

Santander recibió el karma

El árbitro de aquí el partido sigue en la primera división del fútbol mexicano, sin embargo, al darse de nuevo la final entre los dos equipos de aquellos años pero en el 2023, el árbitro fue relegado a pitar en la cuarta división profesional para estar lo más alejado posible de la polémica tras favorecer a  Chivas.